"El deporte es tremendamente justo en el sentido de repartir la suerte a lo largo de una temporada"

La carrera de Hungaroring ha dejado buen sabor de boca en Ferrari. La sensación de que el título es posible inunda Maranello, pero no pueden apartar tampoco la imagen de los Red Bull dominando cada vuelta con más de un segundo de ventaja sobre el resto. «Si eso continuara es para dar carpetazo al Mundial», advierte Fernando Alonso. Pero el asturiano confía en que no sea así. Y lo intuye: «Esperamos una buena evolución en nuestro coche para la próxima carrera. Además, después de las vacaciones, llegan dos circuitos, Spa y Monza, que no beneficiarán tanto a nuestros rivales».

El Mundial se ha apretado en las dos últimas carreras hasta dejar a cinco pilotos en solo 20 puntos. Alonso, sin embargo, descarta a uno de ellos en la lucha final. «Vemos que Button, inevitablemente, se está cayendo poco a poco, porque había cogido puntos un poco de regalo, entre comillas, en algunas carreras. Hamilton va a estar muy fuerte y los Red Bull van a estar ahí siempre. Va a estar difícil, pero ahora hay más esperanza, 47 puntos era complicado de remontar, pero ahora, con 20, depende más de nosotros». Las desgracias comienzan a repartirse. «El deporte es tremendamente justo en el sentido de repartir la suerte a lo largo de una temporada», insiste Alonso.

MEJORAR EL COCHE / Se hace difícil pensar en recuperar puntos ante los portentosos Red Bull. «En Hungría parecían un coche de otro planeta», reflexiona Stefano Domenicali, director de Ferrari. Pero recalca también que la distancia entre Ferrari y Red Bull está «en el punto medio, ni la igualdad de Alemania, ni la ventaja de Hungría». En Ferrari creen saber de dónde les sacaban ese segundo de ventaja. «En Budapest, su motor tiene poca importancia, porque apenas hay una recta. Y el motor es su único defecto porque es algo menos potente que el resto. Por eso Renault lleva pidiendo a gritos desde hace tiempo la descongelación», revela Alonso, que añade: «El motor volverá a ser decisivo en Spa y Monza, y ahí regresarán a la lucha también los McLaren». Christian Horner, jefe de Red Bull, reconoce esta desventaja: «Por eso era tan importante sumar puntos en Budapest».

MÁS PODIOS / Mientras Webber disfruta en su barco de Mónaco, Domenicali da vueltas a la ventaja de los Red Bull. «En Budapest, solo teníamos una frenada en recto, seguido de un cambio rápido de dirección, que es nuestro punto fuerte». En cambio, la inmensa mayoría del trazado era el escenario perfecto para la excepcional carga aerodinámica que genera el Red Bull: curvas suaves y rápidas, de radio constante, el ideal para Red Bull. «Esperemos que la superioridad de Hungría no se repita y que no saquen un segundo a todos los demás. En Spa tendremos, seguro, un coche más competitivo», avanza Alonso, que añade, convencido, que «la única posibilidad de aspirar al título es no bajarse del podio en ninguna de las próximas carreras».

Foto y texto: elperiodico.com