Pulgares de diez millones de euros

Los niños que se juntaron en los cojines rojos, "of course", de la imponente sala recién estrenada de la ciudad financiera del Santander, cazaron a Fernando Alonso, entrenado de sobra él para escapar de cualquier trance oral comprometido y con público. Pero no para esto. "¿Por qué el Pato Donald tiene sobrinos si no tiene hermanos?". O para esto. "Dime dos primos de Pocoyó". O más. "¿Conoces la isla de los Gormiti?". Los chavales acorralaron al campeón del mundo de la única forma que permitían las circunstancias en la firma del primer acuerdo entre el piloto y su principal patrocinador, el banco Santander.

Porque lo otro, las preguntas libres de la prensa, no estaban bien vistas en la sobreprotección que reciben casi todas las estrellas del deporte en los actos organizados. Estaba Alonso y se le preguntó por los motores de Ferrari que han echado humo últimamente, por las presuntas barrabasadas de Hamilton... Y el asturiano tiene réplicas para todo, porque lleva media vida contestando a la prensa. "Tengo un superequipo y la posibilidad real de luchar por el título mundial. Vuelvo a disfrutar con la opción de volver a ganar y confirmar que vuelvo a estar ahí".

El Santander siguió a Alonso a Ferrari y este lunes rubricó el primer compromiso personal con el piloto. Protagonizó la nueva campaña de seguros del banco. Y como gancho, sus manos.

El Santander regaló un seguro de vida y accidentes al asturiano por valor de diez millones de euros. La póliza cuenta con una cobertura especial para sus pulgares, el apéndice más sensible para la conducción de cualquier tripulante de bólidos de carreras.

Una estrategia de marketing para entroncar con la promoción del Gran Premio de España (Montmeló, 9 de mayo). "En Europa llega la hora de la verdad, el momento de demostrar quién puede ser campeón del mundo y quién no", explicó Alonso.

El bicampeón del mundo considera que el Mundial prácticamente no ha empezado. "Hasta ahora hemos vivido carreras atípicas por el clima. Veremos quién es capaz de evolucionar mejor sus coches". Y añadió: "Dije que el F10 era el mejor monoplaza que había conducido nunca y lo sigo pensando. Aunque siempre pienso que el mejor coche siempre está por llegar".

Texto: las provincias